Hoy quiero hablarte sobre un tema
que preocupa a muchos de nosotros, la Felicidad, hablamos sobre la felicidad,
deseamos felicidad a otros y a nosotros, pero, no sabemos a ciencia cierta que
es Felicidad.
Trataré de hacer un esbozo rápido
de este tema.
La publicidad nos muestra algo
que denomina subliminalmente felicidad, por ejemplo, muestra una pareja tomando
una bebida cola, sonriendo, confundiendo felicidad con placer, etc.
Por lo cual para comenzar veamos
algunas definiciones:
Si analizamos cual es el origen del término, felicidad
deriva del latín felicitas que puede traducirse como “fértil” [1] y una
de las acepciones de fértil es que produce abundancia y, disfrutar de un gran
bienestar [2], por lo que podemos inferir que la felicidad nos produce un gran
bienestar.
Encontré varias definiciones de
Felicidad, y que te las voy a transcribir:
La definición de felicidad en el diccionario de Google dice “Estado de ánimo de la
persona que se siente plenamente satisfecha por gozar de lo que desea o por
disfrutar de algo bueno”.
Por
otro lado, en Wikipedia nos encontramos con: “La felicidad es una emoción que se produce en un ser vivo
cuando cree haber alcanzado una meta deseada.”
Y
si buscamos la definición de felicidad en
el diccionario de la Real Academia nos indica que felicidad es un “Estado de grata
satisfacción espiritual y física.”
¿Tú
que piensas?
En base a lo expresado antes,
podemos concluir que la felicidad es un estado
del ánimo que
supone una satisfacción,
quien está feliz se siente a gusto, contento y complacido. De todas formas, el
concepto de felicidad es subjetivo y relativo.
Pero, si seguimos con las
definiciones leemos que no existe un índice de felicidad o una categoría que
haya que alcanzar para que alguien se considere como una persona feliz.
Desde un punto de vista
biológico, la felicidad es el resultado de una actividad neural fluida, donde
los factores internos y externos estimulan el sistema
límbico.
Muchos son los estudios y las
ramas científicas que se han centrado en analizar en profundidad el concepto de
felicidad y es que la misma es el objetivo que todas las personas buscamos a lo
largo de nuestra vida.
En concreto, nos topamos con el
hecho de que tanto la filosofía como la antropología, la sociología o la
psicología tienen como elemento de trabajo a aquella.
Pero
si profundizamos más, la felicidad es solo una palabra. Nada nuevo. Pero cada
uno se imagina o siente cuando dice o escucha esa palabra cree que esa es la
verdadera felicidad.
Por
lo que podemos concluir que la felicidad es un concepto abstracto. Que, si le
preguntamos a 10 personas la definición de felicidad, obtendremos 10 definiciones diferentes.
Más
allá de saber qué es la felicidad, tenemos que tomar consciencia de esto, porque nos
ayudará a comprender por qué algunas personas son felices con menos que otras,
por qué algunas personas son felices haciendo daño y otras haciendo caridad.
Podemos suponer que es muy difícil encontrar una
definición de Felicidad, pero como comprobarás en algún momento lo sencillo es
a veces complicado para la mente y ésta siempre busca afuera, se complica y por
eso a cada respuesta que da genera dos preguntas adicionales.
Así mientras que la Antropología
lo que hace es investigar cómo las distintas culturas han conocido que la
felicidad es una cosa y no otra, la sociología estudia lo que son los factores
sociales que contribuyen no sólo a lo que cada individuo considere como tal
sino también a lograr la misma.
Por su parte, dentro de la
Psicología Positivista, que fue fundada entre otras por el psicólogo
norteamericano Martin Seligman[3],
considera que la felicidad es el fruto de la suma de lo que son las actividades
positivas y las emociones positivas. En concreto ejemplos de estas últimas
serían la satisfacción, el placer corporal, el orgullo, la alegría o el
optimismo.
El ser humano suele sentir
felicidad cuando alcanza
sus objetivos y
cuando logra solucionar los distintos retos que se enfrenta en su vida
cotidiana.
En los casos en que esto no se
logra, se produce la frustración que lleva a la pérdida
de la felicidad.
Hay quienes creen o sienten que
la felicidad está relacionada con los bienes
materiales y
con el dinero,
pero confunden felicidad con seguridad para ahora y el futuro, ese sentimiento
de seguridad va acompañado por la preocupación de como evitar que se lo quiten, por lo que no es felicidad.
Por eso existen frases como “El
dinero no hace la felicidad, pero ayuda”. Es que el dinero es el
medio necesario para la satisfacción de las necesidades materiales humanas; una
vez que éstas están satisfechas, el individuo tiende a buscar productos que le
proporcionen mayor felicidad.
En cambio, las religiones y la
gente con preferencia por lo espiritual asocian la felicidad a un estado del
alma donde el ser se siente en paz. Este estado puede alcanzarse con una
relación personal o con el vínculo con los seres queridos, por ejemplo.
Aunque
existan infinitas definiciones de felicidad, podemos acercarnos e intentar
definir qué es la felicidad.
Te
preguntaría que piensas sobre la Felicidad: …
¿Es
un sentimiento?
¿Es
una emoción?
¿Es
un estado de ánimo?
¿Es
una idea racional?
¿Que
respuesta darías a estas preguntas? ...
Cuando
tu dices que sientes feliz, es porque has racionalizado un conjunto de
emociones o estados de ánimo. Y según la persona que experimenta esa felicidad,
dichas emociones pueden ser la tranquilidad, la paz, la ambición, la empatía, la compasión, la excitación,
la alegría, la voracidad y el alivio, entre otras.
Pero
depende como seamos podemos sentir felicidad porque alcanzamos un estado
emocional deseado, o porque nos alejamos de un estado emocional no deseado por
lo que podríamos definirla como un sentimiento.
También puede ocurrir que
es un acto racional pues si definimos como un sentimiento, ten en cuenta que todos los sentimientos incluyen el acto de pensarlo.
Aparentemente, según lo que
venimos desarrollando uno no puede estar feliz todo el tiempo, por lo que definimos la felicidad
como momentos.
Mucha gente en algún momento se
ha detenido a preguntarse ¿Qué es la felicidad? ¿Existe? ¿Es posible
ser feliz todo el tiempo? o ¿Es una utopía?
Nos obsesionamos demasiado con la
felicidad, con intentar estar contentos todo el tiempo, con solo mostrar
nuestra mejor cara, les deseamos felicidad a nuestros amigos para las fiestas.
Creemos que la felicidad es la
meta y nos olvidamos de que solo podemos encontrarla en el camino.
Esto
nos lleva a observar que la felicidad, además de ser una racionalización, es un
estado pasajero. No es un objetivo que se alcanza, como comprar un coche, y
punto. No, la felicidad hay que alimentarla y mantenerla.
¿Cuántas veces hemos escuchado la frase ¡“Antes sí que era feliz”!?
¿Cuántas veces hemos escuchado la frase ¡“Antes sí que era feliz”!?
Y
por lo que desarrollamos hasta ahora podemos concluir que:
1-No
podemos definir felicidad porque es un término individual, de cada ser en
particular.
2-La felicidad no es permanente.
3-La felicidad no está ahí afuera, habita adentro nuestro.
4-La felicidad es un pensamiento sobre cómo me siento.
Como
ves, aparentemente no es sencillo definir que es la felicidad, y si
profundizamos vemos que cada disciplina tiene una definición que no es
completa.
Por
ejemplo
La
filosofía estudia su concepto y realidad.
La
psicología positiva[4] intenta
determinar los factores que internamente originan que el individuo puede
manejar para alcanzar ese determinado estado de ánimo.
La
sociología se ocupa de analizar que factores sociales determinan los objetivos
que el sujeto se marca como meta para alcanzar estados de felicidad.
La
antropología muestra como distintas culturas han establecido cánones distintos
al respecto.
Y
así podríamos seguir y seguir.
Como
puedes ver, cada especialidad se concentra en una pequeña parte tratando de dar
respuesta a esta pregunta que viene movilizando pensadores de todos los tiempos
empezando por la antigua Grecia hasta nuestros días que puede resumirse en lo
que dijo Daniel Bensaïd, filosofo francés contemporáneo:
… “todos los grandes pensadores de la historia han dejado la felicidad en lo
impreciso para que cada uno lo redefina en sus propios términos”... “esos
mágicos momentos en los que uno se siente bien y hay menos conflictos internos.
Y estoy en armonía conmigo y el entorno… el placer está mucho más
relacionado con condiciones externas, con lugares, con gente, con el tiempo… y
es vulnerable a ciertos cambios, algo placentero se vuelve desagradable y eso
también cambia a medida que lo experimentas” ...
Si
observas todos los comentarios que venimos describiendo se basan en la mente y
el ego, por lo que quizás debemos enfocarnos en el Ser y posiblemente
encontremos la respuesta.
Hay
otra forma de observar y ver el tema y es desde el Ser.
Fijemos
nuestra atención en la filosofía oriental, desde esa mirada la felicidad se
concibe como una cualidad producto de un estado de armonía interna que se
manifiesta como un sentimiento de bienestar que perdura en el tiempo y no como
un estado de ánimo de origen pasajero, como generalmente vimos que los
distintos pesadores y disciplinas occidentales lo definen.
Esta
es la postura de Matthieu Ricards [5],
considerado el hombre más feliz del mundo, él expresa: … “muchas veces
confundida con la alegría de carácter emocional y efímero, la felicidad perdura
en el tiempo y se identifica con una cualidad, tal como ser alto, fuerte o
inteligente una persona es feliz” …
“… Entenderé aquí
por felicidad un estado adquirido de plenitud subyacente en cada instante de la
existencia y que perdura a lo largo de las inevitables vicisitudes que la
jalonan. En el budismo, el término sukha
designa un estado de bienestar que nace de una mente excepcionalmente sana y serena.”
“Es una
cualidad que sostiene e impregna cada experiencia, cada comportamiento,
que abarca todas
las alegrías y
todos los pesares, una felicidad tan profunda que nada puede alterarla, como esas extensiones de agua en
calma bajo la tormenta. Es, asimismo un estado de
sabiduría, liberada de los
venenos mentales, y de conocimiento, libre de ceguera sobre la
verdadera naturaleza de las cosa”
…
… “Asi pues, quien experimenta
la paz interior no se siente ni destrozado por el fracaso ni
embriagado por el éxito. Sabe vivir plenamente esas
experiencias en el contexto de una serenidad profunda y vasta, consciente
de que son efímeras y de que no tiene
ningún motivo para aferrarse a ellas.
No cede ni cae cuando las cosas toman un
mal giro y debe hacer frente a la adversidad. No se hunde en la depresión,
pues su felicidad reposa sobre sólidos cimientos”[6]…
Recuerda:
"No hay un camino a la felicidad: la felicidad es el camino"
Buda Gautama.
A lo que yo le agregaría el camino es la Armonía.
Eduardo Seleson
[3] Martin
Seligman (n. 12 de agosto de 1942) es un psicólogo y
escritor estadounidense, es director del Departamento de Psicología de la
Universidad de Pensilvania. Previamente había ocupado el cargo de presidente de
la Asociación Estadounidense de Psicología desde 1996. Fue también el primer
redactor jefe de la Prevention and Treatment Magazine, el boletín
electrónico de la asociación. En los últimos años se le conoce igualmente por
su trabajo e influencia en el campo de la psicología positiva, disciplina que estudia cientificamente el funcionamiento humano positivo y el florecimiento en múltiples niveles que incluye las dimensiones biológica, personal, relacional, institucional, cultural y global de la vida.
[4] La psicología positiva es "el estudio
científico del funcionamiento humano positivo y el florecimiento en múltiples
niveles que incluye las dimensiones biológica, personal, relacional,
institucional, cultural y global de la vida." 1
se encarga de estudiar las bases del bienestar psicológico y de la felicidad,
así como de las fortalezas y virtudes humanas. La psicología positiva
reflexiona sobre lo que le da valor a la vida, y qué factores contribuyen para
vivir una vida plena
[5] Matthieu Ricardes hijo del renombrado filósofo francés Jean-Francois Revel (Jean-François Ricard) y de la pintora
Yahne Le Toumelin, por lo que creció rodeado de las ideas y personalidades de
los círculos intelectuales franceses. Viajó por primera vez a la India en 1967.
Estudió en el Lycée
Janson de Sally de Paris.
Obtuvo el doctorado en Biología Molecular en el Instituo Pateur bajo el
patrocinio del premio Nobel de Fisiología o Medicina Francois Jacob. Después de
terminar su tesis doctoral en 1972, Ricard decidió abandonar su carrera
científica y concentrarse en la práctica del budismo tibetano. Vivió en el Himalaya y fue discípulo de Kangyur Rimpoche,
un maestro de una ancestral escuela budista de la tradición Nyingma. Después se
convirtió en discípulo cercano de Dilgo Jhyentse. Desde entonces, ha dedicado
sus esfuerzos a completar la visión de Khyentse Rinpoche.
Entre otras obras, Matthieu
Ricard es autor de El monje y el filósofo (Le Moine et le Philosophe),
libro que recoge un diálogo con su padre, fue un best-seller en
Europa y fue traducido a 21 idiomas, y El
infinito en la palma de la mano (L'Infini
dans la paume de la main), en colaboración con Trinh Xuan Thuan) refleja su
interés en la relación de la ciencia y el budismo. Su libro: En defensa de la felicidad (Plaidoyer pour le bonheur)
también se convirtió en un best-seller en Francia.
Miembro del Mind and Life Institute, y asiduo participante de los encuentros y el desarrollo colaborativo entre científicos, estudiantes budistas y meditantes, sus contribuciones han aparecido en "Emociones Destructivas" (Destructive Emotions), editado por Daniel Goleman y en otros libros de ensayo.
Está involucrado en el estudio y desarrollo sobre los efectos del entrenamiento mental sobre el cerebro en varias instituciones como las universidades norteamericanas de Madison-Wisconsin, Princeton y Berkeley.En un estudio realizado en la Universidad de Wisconsin, investigadores colocaron 256 electrodos en su craneo y lo sometieron a un aparato de imágenes funcionales por resonancia magnética nuclear (MRI). Se encontró que Matthieu Ricard logró el más alto nivel de actividad en la corteza pre-frontal izquierda, la que se asocia a las emociones positivas, la escala varía de +0.3 a -0.3 (beatitud), Mathieu Ricard alcanzaba resultados de -0.45, desbordando los límites previstos en el estudio, superando todos los registros anteriores y ganadose el títulodel “el hombre más feliz de la tierra”.
Miembro del Mind and Life Institute, y asiduo participante de los encuentros y el desarrollo colaborativo entre científicos, estudiantes budistas y meditantes, sus contribuciones han aparecido en "Emociones Destructivas" (Destructive Emotions), editado por Daniel Goleman y en otros libros de ensayo.
Está involucrado en el estudio y desarrollo sobre los efectos del entrenamiento mental sobre el cerebro en varias instituciones como las universidades norteamericanas de Madison-Wisconsin, Princeton y Berkeley.En un estudio realizado en la Universidad de Wisconsin, investigadores colocaron 256 electrodos en su craneo y lo sometieron a un aparato de imágenes funcionales por resonancia magnética nuclear (MRI). Se encontró que Matthieu Ricard logró el más alto nivel de actividad en la corteza pre-frontal izquierda, la que se asocia a las emociones positivas, la escala varía de +0.3 a -0.3 (beatitud), Mathieu Ricard alcanzaba resultados de -0.45, desbordando los límites previstos en el estudio, superando todos los registros anteriores y ganadose el títulodel “el hombre más feliz de la tierra”.
[6] Extraído del libro “En defensa de la Felicidad” Matthieu Ricard editorial Urano Capitulo 1
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